Tu realidad está cambiando 💜✨
El despertar espiritual es un viaje profundamente personal y transformador hacia una comprensión de quiénes somos y del propósito de la existencia. Significa mirar hacia el interior, cuestionar nuestras creencias y valores, y buscar una conexión más significativa con algo más grande que la mera existencia cotidiana: un viaje interno que nos lleva más allá de las limitaciones de la mente y nos conduce a un estado de consciencia expandida.
Es como si el alma anhelara algo más que lo ordinario, como si hubiera un llamado hacia algo que no se puede encontrar en logros materiales o en el éxito superficial. Este es el comienzo del despertar espiritual, la primera etapa de este viaje increíble. Debes saber que puede variar de persona a persona, pero suele incluir los siguientes aspectos: sentirse vacío, cuestionar el propósito personal, sentirse desconectado, entre otros.
También puede pasar en una situación personal, como la pérdida de un ser querido, una ruptura afectiva, una enfermedad grave o un evento traumático. Esto puede llevarte a cuestionar el significado de la vida, y en consecuencia, a buscar respuestas más trascendentes. Tene presente que la situación inicial sirvió como llamado a este viaje y la iluminación es la respuesta.
La iluminación conduce a un cambio fundamental en la perspectiva, los valores espirituales se convierten en el centro y la búsqueda del
crecimiento interior, el servicio a los demás y contribuir a un mundo más amoroso, se vuelven prioridades. Las ilusiones se desvanecen y comenzamos a ver la verdadera naturaleza de la realidad. Esto incluye comprender que la vida va más allá de las apariencias superficiales.
Vivir auténticamente se vuelve una prioridad. Ya no tememos el juicio o el rechazo porque entendemos que ser como verdaderamente somos,
es más importante que la aprobación de otros. Dejamos de seguir ciegamente enseñanzas externas para confiar en la sabiduría de nuestro propio corazón. Aquí expresamos nuestra verdad con valentía y compasión; es un acto de aceptación del yo interno.
Nuestras elecciones afectan no solo la vida propia, sino a toda la existencia, ya que todo se convierte en una parte integral del viaje. Ser profundamente agradecido por la capacidad de co-crear y tratar de servir al mundo desde el ser creativo, se convierte en una forma de honrar a la fuente divina de toda la realización.
Así, nos sumergimos en un océano de amor incondicional y comprendemos que el amor es la esencia de todo, y la fuerza que sustenta el universo. Porque el amor incondicional no es solo un sentimiento, sino una forma de ser.
Así que recorda, todos somos uno; cada ser es una expresión del mismo amor de Dios. Cada uno de nosotros está en su propio camino de evolución y este despertar nos recuerda el infinito poder y potencial que vinimos a desarrollar.
Por eso, abraza este viaje con humildad, gratitud y amor.
Con cariño,
Angie
